Tomar caña con ruda el 1° de agosto es un ritual que busca atraer salud, suerte y protección. Descubre cuándo y cómo se toma esta bebida tradicional.
Cada 1° de agosto, en Argentina, se celebra un ritual ancestral que ha sido transmitido de generación en generación: tomar caña con ruda. Esta tradición, profundamente enraizada en las provincias de Misiones y Corrientes, se ha extendido a todo el país, convirtiéndose en un símbolo de protección, salud y buena fortuna.
Origen y significado del ritual
La práctica de tomar caña con ruda tiene sus raíces en los pueblos originarios de América, quienes descubrieron las propiedades medicinales de la ruda. Utilizada para combatir parásitos, aliviar malestares gastrointestinales y calmar picaduras de insectos, la ruda se combinaba con caña para crear un remedio natural. Durante el mes de agosto, cuando las lluvias y el frío causaban enfermedades, esta bebida se convertía en una protección esencial.
Con el tiempo, el imaginario guaraní otorgó a esta mezcla propiedades mágicas, considerándola un conjuro contra la envidia y la mala suerte. Así, la tradición de tomar caña con ruda se consolidó como una forma de agradecer y pedir bendiciones a la Pachamama, la Madre Tierra.
¿Cuándo se toma?
La caña con ruda se toma el 1° de agosto, coincidiendo con el Día de la Pachamama. Esta festividad celebra el inicio de la temporada de lluvias o el fin de la época seca, simbolizando un momento de renovación y gratitud por la fertilidad de la tierra y las cosechas. Aunque la tradición dicta tomarla el 1° de agosto, aquellos que no lo hagan en esa fecha tienen hasta el 15 del mes para cumplir con el ritual.
La caña con ruda llegando para salvarnos pic.twitter.com/5E7mtGyXAr
— Christian Chena (@christianchena) July 27, 2024
¿Cómo se prepara?
Es sencillo y requiere pocos ingredientes:
1. Consigue una botella de vidrio limpia y transparente.
2. Llena el recipiente con caña o ginebra hasta 3/4 de su capacidad.
3. Agrega hojas o ramitas de ruda macho, disponibles en verdulerías y viveros.
4. Tapa la botella y deja macerar en un lugar fresco y alejado de la luz. Cuanto más tiempo repose, más sabor tendrá.
La preparación se conserva de manera segura por al menos un año, y con el tiempo, las hojas de ruda cambian de color de verde intenso a ámbar.
¿Cómo se toma?
Para cumplir con el ritual y obtener sus beneficios, es importante tomar la caña con ruda en ayunas. El proceso consiste en:
1. Beber en 3 sorbos, 7 sorbos o de un solo trago.
2. Echar un chorrito del brebaje en la tierra, que puede ser una maceta, como ofrenda a la Pachamama.
3. Decir “kusiya, kusiya”, que en aymará significa “ayúdame, ayúdame”.
La Caña con Ruda en la cultura actual
Hoy en día, la caña con ruda no solo es popular en el norte argentino, sino que se ha convertido en una práctica común en todo el país. En Buenos Aires y otras ciudades, bares y restaurantes ofrecen esta bebida en los días cercanos al 1° de agosto, permitiendo que la tradición se mantenga viva y accesible para todos.
El valor cultural de este ritual radica en su capacidad de conectar a las personas con sus raíces y con la naturaleza. En una era cada vez más tecnológica y urbana, la caña con ruda nos recuerda la importancia de la tierra y de las prácticas ancestrales para mantener el equilibrio y la salud.
En definitiva, tomar caña con ruda es mucho más que cumplir con una tradición. Es revalidar un vínculo con la historia y con la esencia de la tierra, buscando salud, suerte y protección para el año venidero.
