Esta incorporación podría mejorar la experiencia de los usuarios con problemas de visión.
Apple continúa trabajando en los últimos detalles de sus futuras gafas de realidad virtual Vision Pro, por lo que los rumores alrededor de su lanzamiento no paran de llegar. Esta vez una solicitud de patente dejó en evidencia las intenciones de la compañía de explorar la posibilidad de añadir lentes líquidos que llegarían a su sistema para mejorar la experiencia de los usuarios con problemas de visión.
La tecnología de los lentes líquidos facilita la adaptación a la vision del usuario, corrigiendo así posibles incomodidades como miopía, hipermetropía o astigmatismo. En teoría, el usuario no debería utilizar gafas graduadas debajo del dispositivo, lo que permitiría una experiencia más cómoda e inmersiva.
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Los lentes líquidos se basan en el uso de fluidos que modifican su forma y enfoque. Diferenciándose al sistema de las lentes convencionales, que se caracterizan por ser rígidas y fijas, las liquidas pueden cambiar su curvatura y distancia focal dependiendo de las necesidades del usuario dado a que son capaces de adaptarse su imagen a la vision del mismo, evitando así incomodidades como fatiga visual y distorsión.
En este sentido, las lentes liquidas poseen la capacidad innovadora de cambiar su enfoque en tan solo milisegundos, lo que permite adaptar sus necesidades a las visuales del usuario en tiempo real, lo que elimina la necesidad de utilizar lentes de prescripción.
Estas lentes se forman con dos capas, una externa de materiales como vidrio o plástico que funciona como soporte y protección, y una capa interna de fluido, mismo que puede ser agua o aceite. Este último se encuentra en una cámara sellada que posee electrodos en cada uno de sus bordes, al entrar en contacto con corriente estos generan un campo eléctrico que altera la tensión superficial del fluido, facilitando su expansión o contracción, lo que modifica la forma y el enfoque de la lente.
A pesar de que el sistema de funcionamiento de las gafas Apple Vision es aún un total misterio, las lentes liquidas podrían ser una gran innovación para trabajar junto con un sistema de seguimiento ocular del dispositivo, dado a que este detecta el movimiento y la posición de los ojos del usuario para determinar a qué distancia se encuentra mirando y así ajustar el enfoque del objeto digital. De esta manera, el sistema evita el desenfoque o la borrosidad que suele interferir en la experiencia del usuario cuando este cambia la mirada entre objetos cercanos y lejanos.
