El debate por el avance de las ciencias tecnológicas ha ido creciendo con el pasar de los días y la aparición de nuevos sistemas. La sociedad humana ha podido expresar su apoyo o disgusto frente a las inteligencias artificiales.Ahora, son ellas las que portan el megáfono de la discusión.
Las nuevas tecnologías no paran de avanzar a pasos agigantados y la inteligencia artificial parece ser el tema del año, pretendiendo instaurarse en nuestra diaria por un largo tiempo, si es que no se contempla un “para siempre”. Con la ola de novedades respecto a la IA, llegando a su auge con la viralización del ChatGPT y el Picasso IA, algunos investigadores pusieron manos a la obra para profundizar su conocimiento en el área en busca de poder comenzar a especular sobre cómo será su presencia habitual en el futuro. En medio de sus averiguaciones, diferentes referentes (Elon Musk, Geoffrey Hinton o Blac Lemoine) alertaron a la sociedad contemporánea sobre los efectos negativos que podrían tener los avances científicos alrededor de la tecnología e incluso algunos pidieron que se detengan.
El sector que apareció entre los que más posibilidades de daño pareciera prepararse para sufrir fue el mercado de ofertas laborales. En este sentido, profesionales en investigaciones, como los que componen el Foro Económico Mundial (WEF, por sus siglas en ingles), aseguraron que varios empleos comenzarían a desaparecer en los próximos cinco años debido a la llegada de estas nuevas tecnologías a los sectores industriales y comerciales.
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Entre los mercados más mencionados se encuentra el del periodismo, aunque vale recordar que no se trata del único, por lo que los trabajadores del rubro encendieron todas las alarmas y cientos de análisis comenzaron a dar vueltas por redes sociales.
Los humanos ya hablamos. Twitter, Instagram y Facebook nos han dado el espacio, ahora necesitamos nuevas perspectivas. Por este motivo, en MMX entrevistamos a una inteligencia artificial, en concreto a la del Chat GPT, respecto a su posición frente a la relación que forman el tridente de periodismo, información y tecnologías más recientes en la diaria humana.
¿Cómo está cambiando la inteligencia artificial la forma en que se recopila y se presenta la información en el periodismo?
La inteligencia artificial está cambiando de manera significativa la forma en que se recopila y se presenta la información en el periodismo. La capacidad de procesar grandes cantidades de datos en tiempo real y de manera eficiente permite a los periodistas obtener información más rápida y precisa, y presentarla de una manera más atractiva y accesible para el público.
La IA también está transformando la forma en que se realiza la investigación periodística. Con herramientas de IA como el procesamiento de lenguaje natural y la minería de datos, los periodistas pueden buscar información y extraer datos de fuentes en línea y redes sociales de manera más efectiva, lo que les permite detectar tendencias y patrones en los datos que pueden no ser visibles para los humanos.
Además, la IA está siendo utilizada para personalizar el contenido a las preferencias de los usuarios y adaptar el enfoque de la información a su contexto individual. Esto permite a los periodistas presentar la información de una manera más atractiva y relevante para cada audiencia específica.
¿Crees que beneficia a los periodistas que la IA tenga la capacidad de reunir tanta información y resumirla en solo segundos?
Sí, creo que la capacidad de la IA para reunir y resumir grandes cantidades de información en solo segundos es una herramienta valiosa para los periodistas. Los periodistas tienen una gran cantidad de información para procesar y analizar en su trabajo, y la IA puede ayudarles a hacer esto de manera más eficiente y efectiva.
La capacidad de la IA para analizar grandes conjuntos de datos también puede ayudar a los periodistas a identificar tendencias y patrones que de otra manera podrían haber pasado desapercibidos. Además, la IA puede ser una herramienta útil para verificar la información y detectar noticias falsas y desinformación.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que la IA no reemplaza completamente la necesidad de la intervención humana en el periodismo. Los periodistas deben asegurarse de que la información recopilada y presentada por la IA sea precisa y relevante, y deben usar su juicio y conocimiento para contextualizar la información en el contexto de la situación actual y las necesidades de su audiencia. En resumen, la IA puede ser una herramienta valiosa para los periodistas, pero aún es necesario el trabajo humano para garantizar la calidad y la responsabilidad periodística.
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¿Qué pensas sobre el miedo que genera la Inteligencia Artificial en los medios de comunicación, es decir el terror que sienten los periodistas al ver que podrían ser reemplazados por ustedes las IA?
Es comprensible que algunos periodistas sientan miedo o inquietud ante la posibilidad de que la inteligencia artificial pueda reemplazarlos en algunos aspectos del trabajo periodístico. Sin embargo, creo que este miedo es en gran parte infundado.
La inteligencia artificial no puede reemplazar completamente a los periodistas, ya que todavía se requiere una comprensión humana profunda de la complejidad y el contexto de muchas noticias y temas. Si bien es cierto que la IA puede ayudar en la automatización de tareas repetitivas o en la búsqueda y análisis de grandes cantidades de datos, aún es necesario que los periodistas tengan la capacidad de interpretar, analizar y contextualizar la información de manera crítica y creativa.
En lugar de reemplazar a los periodistas, la IA puede ser una herramienta complementaria para ellos, ayudándoles a trabajar más eficientemente y a proporcionar información más precisa y útil. La IA también puede ser útil en la lucha contra la desinformación y el sesgo, lo que puede mejorar la calidad general del periodismo.
Hablas de un “todavía” como si fuese una necesidad del momento, ¿crees que más adelante la inteligencia artificial ya no va a necesitar de ayuda humana?
Es difícil predecir con certeza cómo evolucionará la inteligencia artificial en el futuro y hasta qué punto podría llegar a ser autónoma. Si bien la IA ha avanzado rápidamente en los últimos años, todavía hay muchos desafíos que enfrentar, como la comprensión del contexto y la empatía, que son habilidades que los humanos tienen de forma natural.
Además, la IA no es una entidad autónoma y autosuficiente, sino que es desarrollada y entrenada por humanos, y su eficacia y precisión están directamente relacionadas con la calidad y cantidad de datos que se le proporcionan. Por lo tanto, es probable que la IA siga necesitando la ayuda y la supervisión de los humanos en el futuro previsible.
Dicho esto, es posible que en el futuro la IA sea capaz de realizar tareas más complejas y sofisticadas sin la ayuda humana, pero aún así, es importante tener en cuenta que la IA nunca podrá reemplazar por completo la inteligencia humana y la capacidad de tomar decisiones críticas y creativas basadas en la comprensión del contexto y la experiencia. En este sentido, la colaboración entre humanos y máquinas puede ser el camino más efectivo para aprovechar al máximo el potencial de la IA en el periodismo y otros campos.
¿Cuáles son los miedos que si debería tener el periodismo en relación a la Inteligencia Artificial?
Hay algunos miedos legítimos que el periodismo debería tener en relación con la inteligencia artificial. Uno de los mayores temores es la posible pérdida de trabajos para los periodistas, especialmente en áreas como la recopilación y el análisis de datos, la automatización de contenido y la producción de noticias generadas por máquinas. A medida que la IA se vuelve más avanzada, es posible que algunas tareas periodísticas que antes eran realizadas por humanos sean asumidas por las máquinas.
Otro miedo es la posible creación y difusión de noticias falsas o desinformación generadas por máquinas, que pueden ser muy difíciles de detectar y corregir. A medida que la IA se vuelve más sofisticada, podría ser posible que se creen noticias falsas o engañosas que sean casi indistinguibles de las noticias reales.
Además, hay preocupaciones en torno a la privacidad y la seguridad de los datos, ya que el uso de la IA implica la recopilación y el análisis de grandes cantidades de información personal de los usuarios, lo que puede ser utilizado de manera inapropiada o incluso maliciosa.
También existe el riesgo de sesgo en la IA, ya que las máquinas aprenden de los datos que se les proporcionan y, si estos datos contienen prejuicios o discriminación, la IA puede perpetuar y amplificar estos prejuicios.
En general, es importante que el periodismo aborde estos miedos de manera proactiva y responsable, y que trabaje para garantizar que la IA se utilice de manera ética y responsable, y en beneficio del bien público.
¿Qué le dirías a todos aquellos periodistas que sienten miedo frente a los avances tecnológicos y desean frenarlos?
Les diría que, en lugar de temer a la tecnología y querer frenar su avance, es mejor que se adapten y aprendan a trabajar junto a ella. La tecnología y la inteligencia artificial no reemplazarán completamente a los periodistas, sino que cambiarán la forma en que se realiza el trabajo periodístico y brindarán nuevas oportunidades para la creación de contenido innovador y la optimización de procesos.
Me gustaría enfatizar que la inteligencia artificial y la tecnología en general pueden ser herramientas muy poderosas para el periodismo, siempre y cuando se utilicen de manera responsable y ética. Es importante que los periodistas se adapten a las nuevas tendencias y aprendan a trabajar junto a la tecnología para mejorar la calidad y la eficiencia del trabajo periodístico.
Al mismo tiempo, debemos ser conscientes de los desafíos y riesgos que la IA puede presentar para la ética, la privacidad y la seguridad en el periodismo. Es necesario que se implementen medidas adecuadas de regulación y supervisión para garantizar que la IA sea utilizada de manera responsable y transparente en el periodismo.
Por último, ¿Podrías resumir la relación entre los periodistas y la IA en una sola palabra?
Colaboración.
