El magnate sudafricano demandó al estado americano a través de su compañía X por una nueva norma que endurece las reglas a las grandes empresas tecnológicas.
Elon Musk volvió a convertirse en uno de los temas de agenda debido a ser el protagonista de una dura batalla legal con las autoridades de California, luego de enterarse de que el estado propuso una nueva norma que obliga a las redes sociales a hacer públicas sus políticas internas de moderación en cuanto a la incitación al odio, el acoso, el extremismo y la desinformación, incluyendo a su compañía X, antes conocida como Twitter.
Ante la actualización legal, la gigante tecnología llevó su queja a tribunales argumentando que la ley promulgada en el mes de septiembre de 2022- exactamente un año atrás-, va en contra de la protección de la primera enmienda constitucional que otorga el derecho a la libre expresión. Ocurre que para la plataforma de Elon Musk, el objetivo real de la nueva norma, conocida como la AB 587, es “presionar a las plataformas de redes sociales a eliminar cierto contenido protegido constitucionalmente, visto por el Estado como problemático”.
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Según la denuncia de X, la elección de las temáticas mencionadas como “dañinas u ofensivas” incluso fueron impuestas por creencias partidistas, donde también aseguran que “las redes sociales son frecuentemente criticadas, sin importar lo que hagan, por individuos en ambos bandos (demócratas y republicanos)”.
En tanto, la propuesta legal de X fue presentada en un tribunal de Sacramento, la cual es la capital de California, conocido como el estado más poblado de los Estados Unidos, mismo que fue acusado por la propia compañía de estar obligando a las “redes sociales a tomar posiciones públicas en asuntos controvertidos y políticamente cargados”.
La ley que enfureció a Elon Musk nació en el año 2021 como respuesta a la toma del Capitolio en manos de simpatizantes de Donald Trump, y obliga a las compañías tecnológicas a que, a partir del mes de enero de 2024, entreguen informes detallados donde se expliquen cada una de las medidas que toman para moderar el debate en línea, para así poder hacerlas públicas. EN tanto, la dinámica incluye la exigencia de advertir si la vigilancia de este tipo de contenido queda a cargo de sistemas de inteligencia artificial o como se procede cuando se haya un material publicado en red donde predominan las ofensas o amenazas de usuarios. Todas aquellas empresas que decidan no entregar dicho informe fueron advertidas con que serán multadas inmediatamente.
