El Instituto de Conservación de Ballenas confirmó que se hallaron 12 nuevas ballenas muertas en el Golfo Nuevo, que se suman a los 18 ejemplares encontrados anteriormente, pero aseguraron que los decesos no son recientes porque se encontraban en avanzado estado de descomposición.
El pasado martes investigadores del Programa de Monitoreo Sanitario Ballena Franca Austral realizaron un relevamiento aéreo de las costas de los Golfos Nuevo y San José de Península Valdés con el objetivo de confirmar la presencia y localización de ballenas adultas y juveniles muertas reportadas en días anteriores y detectar posibles nuevos casos.
Según se informó, no se detectaron ballenas adultas o juveniles muertas en el Golfo San José, mientras que en el Golfo Nuevo, a los 18 individuos ya confirmados anteriormente, se suman 12 nuevos casos y, hasta la fecha, el conteo de ballenas muertas de estas clases de edades es de 26 adultas y 4 juveniles, totalizando 30 individuos en la presente temporada.
El Dr. Mariano Sironi, Director Científico del Instituto de Conservación de Ballenas (ICB) y co-director del PMSBFA señaló que: “Todos los ejemplares hallados durante el relevamiento aéreo se encuentran en un estado de descomposición avanzado, sugiriendo una fecha de muerte en un lapso de tiempo similar y que muchos se encuentran en áreas de difícil acceso. El equipo científico del Programa examinará los nuevos ejemplares relevados durante los próximos días para continuar el monitoreo de este evento inusual de mortandad de ballenas en Península Valdés”.
El ICB continúa con el monitoreo mientras aguardan los primeros resultados, que se darán a conocer en cuanto estén disponibles, mientras que se trata avanzar en las investigaciones del INIDEP y del Laboratorio de Fitoplancton de la Universidad Nacional de la Patagonia San Juan Bosco para descubrir la relación de las muertes de ballenas con biotoxinas producidas por microalgas tóxicas durante la actual marea roja en la zona.
