Un canal de televisión y un complejo penitenciario sufrieron dos violentos ataques a tiros durante la noche del miércoles 28 de diciembre, casi en simultaneo.
Rosario volvió a registrar hechos de violencia en sus calles. Esta vez las víctimas fueron un canal de televisión y un complejo penitenciario que, durante la noche del miércoles, sufrieron dos sorpresivos ataques a tiros casi en simultaneo.
La empresa Televisión Litoral (TVL), con su sede en Avenida Presidente Perón al 8100, fue agredida pasadas las 21:30 del miércoles 28 de diciembre. El frente de la construcción de la multimedia dueña de Canal 3, Radio 2, Rosario3 y FM Vida, recibió una lluvia de disparos que, según explicaron testigos del ataque, fueron lanzados desde un auto rojo en el que circulaban al menos dos personas y, al llegar al portón de ingreso, una de ellas efectuó entre 8 y 10 disparos contra él, para segundos después escapar. Aunque sin heridos, dos de las descargas impactaron contra la garita de seguridad.
El ataque no escaló a un homicidio de milagro, debido a que varios de los empleados de la empresa se encontraban en los alrededores del estacionamiento ya que habían finalizado su jornada laboral, según el medio local.
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Pasando las 22, un auto color rojo que cumplía con las características del vehículo que se usó para balear al canal Televisión Litoral fue hallado quemado a 30 cuadras del edificio.
Por otro lado, la segunda balacera tuvo lugar en un complejo penitenciario ubicado en la calle 27 de febrero al 7800, ubicado en el extremo oeste de la ciudad; allí funcionan la cárcel de mujeres y el Orden.
Durante este ataque, el agresor se movilizaba a pie y, al llegar al edificio, efectuó tres disparos. Luego de la descarga terminó por darse a la fuga, sumando el tercer tiroteo en el año a la unidad penitenciaria provincial.
El personal policial de Rosario cree que se trata de un ataque narco debido a que en noviembre la empresa TVL había sufrido un ataque con las mismas características y, luego de que el agresor se dé a la fuga, los efectivos encontraron una nota intimidatoria con la frase: “Con la mafia no se jode”.
