Las autoridades porteñas decidieron instalar un vallado perimetral en las calles Juncal entre Paraná y Talcahuano; y Uruguay entre Montevideo y Arenales
Tras la denuncia de los vecinos por “suciedad y molestias” producida por los militantes en la zona cercana a la casa de Cristina Kirchner, se convocó un operativo de limpieza y seguridad para evitar mayores problemas.
La decisión surgió después del reclamo de los vecinos del barrio Recoleta, donde exigieron una solución ante la presencia de los militantes, los cuales se encontraban apoyando a la vicepresidenta tras la condena pedida por el fiscal Luciani.
Horas después, CFK hizo su descargo: “Hoy amanecí con la esquina de mi casa literalmente sitiada. Las vallas colocadas por el Sr. Larreta son algo más que impedir la libre circulación. Son algo más que sitiar a la Vicepresidenta de la Nación. Quieren prohibir las manifestaciones de amor y de apoyo absolutamente pacíficas y alegres, que tienen lugar ante la ya inocultable persecución del partido judicial”.