Expertos sostuvieron que podrían afectar a los glaciares cercanos, provocando un cambio radical en el ecosistema del último río libre de la Patagonia.
El río Santa Cruz nace en la cordillera de los Andes atravesando toda la provincia del sur debido al deshielo de los grandes glaciares, pero la construcción de la Barrancosa y Cóndor Cliff perjudicaría el patrimonio cultural al tener hechos irreversibles como la inundación de caudales o la modificación antinatural de los glaciares.
Desde Fundación Ambiente y Recursos Naturales (FARN) fueron contundentes con sus palabras, sosteniendo que “es un proyecto cuyo objetivo principal es sostener el vínculo con China, mientras hipoteca nuestros bienes naturales, desoye las advertencias científicas y no respeta los derechos de las comunidades originarias, no puede seguir avanzando”.
El acuerdo con China se remonta al 2013 cuando durante la Presidencia de Cristina Fernández de Kirchner, se acordaron 5 años para realizar las construcciones. Lo cual posteriormente en el 2015 se anunció su cancelación temporal debido a la inviabilidad con la que lo estaban llevando. Finalmente se retomaron los proyectos, a pesar de la negativa de ciertos ambientalistas y expertos.