La vicepresidenta presentó hoy la recusación contra la jueza María Eugenia Capuchetti, cuya labor al frente de la investigación por el intento de magnicidio en su contra cuestionó en duros términos.
Los abogados José Ubeira y Marcos Aldazábal sostuvieron que la jueza incurrió “a casi dos meses y medio del atentado, una serie de resoluciones netamente arbitrarias y la total parálisis investigativa nos han convencido de una manifiesta parcialidad contra esta parte”.
“Estamos ante una de las causas más relevantes de nuestra historia democrática, y necesitamos que la investigación esté liderada por alguien voluntarioso y que las decisiones las tome un/a juez/a imparcial, comprometido/a con la verdad y la justicia, y no con no molestar a quienes no hay que molestar”, insistieron.
La conducta de la jueza, que fue –según los querellantes- “como mínimo, negligente”, se debe a una actitud deliberada por parte del juzgado y no a errores de la investigación. La recusación se fundamenta en el temor de parcialidad por parte de las magistradas, a raíz de una supuesta relación con los ex jefes de la AFI durante el gobierno de Cambiemos, Gustavo Arribas y Silvia Majdalani.
“Capuchetti no es ni objetiva ni subjetivamente imparcial. No es objetivamente imparcial debido a sus indebidas relaciones con la AFI macrista y a las presuntas medidas hechas para medios periodísticos y no para la causa, que surgen de la lectura de ciertos medios de comunicación masiva”, sostiene el escrito de la recusación.