El Gobierno busca, desde la semana pasada, limitar las paritarias a un número que sea lo más cercano posible al 60%. El objetivo es ayudar a contener la inflación, que cerró 2022 muy cerca de las tres cifras. A pesar del pedido formal de la ministra de Trabajo, "Kelly" Olmos, ese objetivo podría quedar muy lejos de las expectativas que tienen los gremios, aunque gran parte de la CGT también busque poner un techo a las negociaciones.
El Gobierno busca, desde la semana pasada, limitar las paritarias a un número que sea lo más cercano posible al 60%. El objetivo es ayudar a contener la inflación, que cerró 2022 muy cerca de las tres cifras. A pesar del pedido formal de la ministra de Trabajo, “Kelly” Olmos, ese objetivo podría quedar muy lejos de las expectativas que tienen los gremios, aunque gran parte de la CGT también busque poner un techo a las negociaciones.
Esta semana comenzarán con las negociaciones salariales de La Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), la Federación de Empleados de Comercio y La Bancaria.
Por su parte, el gremio de ATE envió un pedido formal a Kelly Olmos (firmado por Hugo “Cachorro” Godoy) para reabrir la negociación por los aumentos del 2022 y además incorporar una suma fija de $30.000.
“El salario no alcanza. Todavía existen compañeros con salarios por debajo de la línea de la pobreza: algunos convenios colectivos de trabajo sectoriales inician en niveles salariales muy inferiores a la Canasta Básica Alimentaria. No se puede naturalizar que quienes trabajen en el Estado nacional sean pobres”, indicó el sindicato de estatales.