En la jornada de alegatos en el juicio por el crimen de Fernando Báez Sosa, la fiscalía pidió cadena perpetua para los ocho rugbiers e insistió en que todos son responsables.
Los fiscales Juan Manuel Dávila y Gustavo García pidieron hoy la pena de prisión perpetua para los ocho rugbiers por el crimen de Fernando Báez Sosa ocurrido el 18 de enero de 2020 frente al boliche Le Brique en Villa Gesell y dijeron que los acusados atacaron a la víctima “por sorpresa” y bajo “traición” y que lo mataron tras golpearlo “brutalmente”.
Además, los fiscales también solicitaron que se abra una investigación contra Juan Pedro Guarino y Thomás Colazo por el delito de “falso testimonio” ya que cuando declararon dijeron que no se acordaban lo ocurrido a pesar de haber estado a pocos metros de donde ocurrió el ataque y crimen: “No se acordaron de nada…No tengo dudas de que por una omisión, mintieron”.
Durante las casi cuatro horas de alegatos, los fiscales se explayaron en las pruebas y testimonios que se presentaron durante las 13 audiencias del juicio y dieron a conocer los motivos por los cuales los ocho acusados son coautores del asesinato, y manifestaron que “todos hicieron todo para atacar y matar a Fernando”. “Se los acusa a todos por igual por el delito de homicidio doblemente agravado por alevosía y por el concurso premeditado de dos o más personas en concurso ideal con lesiones”, indicó Dávila.
“Acordaron matar a Fernando”, manifestó uno de los fiscales, y explicó que “el ataque” comenzó a las 4:44:25 del 18 de enero frente al boliche Le Brique y expuso distintos videos. Según la Fiscalía, la alevosía fue “por la menor posibilidad de defensa de la víctima” y que Fernando “se vio disminuido ante la pluralidad de agentes”. En cuanto a la premeditación, el otro agravante, García dijo que no necesariamente implica gran planificación y que los imputados “siete minutos antes del ataque” se reunieron a metros de donde estaba Fernando, luego que ambos grupos fueron echados de Le Brique por la seguridad.
“Lo mataron todos, tal como estaba previsto”, citó la Fiscalía para argumentar la premeditación y, sobre todo, la coautoría, esto es que tienen el mismo nivel de responsabilidad quienes le pegaron a Fernando como los que le pegaron a los amigos del joven para impedir que lo vayan a defender. También como prueba se argumentó que los acusados “filmaron” el inicio del ataque y dijo que eso es prueba de la premeditación. “Hubo 23 testigos presenciales del hecho y dicen que instantáneamente le pegaron a Fernando”, agregó.