La cantante cubana-estadounidense de música tropical fue apodada como “La Reina de la Salsa” y “La Guarachera de Cuba”
Un 16 de julio de 2003 la industria de la música se veía movilizada por el fallecimiento de una de las figuras más importantes de los ritmos latinos del siglo XX: Celia Caridad Cruz y Alfonso, mejor conocida como Celia Cruz. La apodada como ‘La Reina de la Salsa’ y ‘La Guarachera de Cuba’ fue reconocida como una de las máximas exponentes de la historia de su género, además de ser una de las artistas más influyentes de la música en su país.
Celia Cruz contó con una gran trayectoria musical, interpretando y popularizando a nivel internacional los ritmos tropicales, incluyendo el cubano, son montuno, guaguancó, la rumba, la guaracha y el bolero. No obstante, su inmensa fama tuvo lugar gracias a sus producciones de salsa, misma que es una mezcla de son cubano y otros estilos musicales que la catapultaron a la fama mundial.
Te podria interesar:WhatsApp Web: los usuarios podrán ingresar a la plataforma utilizando su número de celular
La cantante cubana, que falleció en Nueva Jersey, Estados Unidos, había comenzado se carrera en La Habana, Cuba, llegando a ser reconocida como la vocalista del conjunto de Sonora Mantencera, una asociación musical que estuvo activa desde el año 1950 hasta 1965. En tanto, hacia 1960, en pleno triunfo de la Revolución cubana, Celia decidió dejar atrás su país para terminar instalándose en Estados Unidos. De este modo, con el tiempo continuó su carrera, primero en México y, más tarde, alcanzando EEUU.
Así es que, en la década de los setenta logró incorporarse en el género de la salsa, luego de su asociación musical con diversos artistas del género en el conjunto de Fania All Stars. De este modo, Celia Cruz fue haciéndose lugar como un mito de la música latinoamericana, cultivando una constante evolución en el mundo de la música, mismo que le permitió continuar vigente hasta el día de su muerte y así conquistar jóvenes generaciones.
La carrera de la cubana Cruz dejó un legado invaluable que abrió paso a generaciones que descubrieron en un arte una impactante forma de inspiración hacia la expresión. Así es que algunas de sus canciones más conocidas fueron “Quimbara”, “Que le den candela”, “La vida es un carnaval”, “La negra tiene tumbao”, “Burundanga” y la versión salsa de “Yo viviré”, siendo que algunas forman parte del patrimonio cultural de Latinoamérica.
Celia Cruz termina por fallecer en el año 2003. Fue en 2002 durante una presentación en México que sufrió un percance de salud por el que se descubre que padecía de glioma, un tumor cerebral muy agresivo que la obligó a someterse a una operación para removerlo y así retomar su carrera. No obstante, aunque tuvo algunas apariciones más en la industria, en la tarde del 16 de julio de 2003 Celia Cruz termina por fallecer en su casa de Fort Lee a los 77 años.