Allanaron el colegio Don Bosco tras identificar a los posibles autores de la explosión que dejó con lesiones a Azul Zabaleta.
El jueves por la mañana, personal policial asistió al establecimiento junto al fiscal de menores, Walter Martínez Soto, para comunicar a tres alumnos que están siendo investigados como posibles responsables del hecho. Además, le secuestraron sus teléfonos celulares.
Una madre de una alumna del colegio, se comunicó con la familia Zabaleta para ayudar con la causa y encontrar a los culpables. La mujer conversó por redes sociales con la mamá de Azul y le pasó los datos, pero pidió, para proteger a su hija, que no revelaran su identidad. Luego la abogada de la familia, la convenció para que declarara bajo reserva de identidad. Declaración que fue suficiente para que el fiscal declinara su competencia.