Sostienen que hay poca o nula presencia policial en los barrios de la ciudad, además de la mala predisposición de algunos efectivos.
Choferes de taxis y remises denuncian que los violentos hechos se suceden de noche pero también a plena luz del día.
Referentes del sector se reunieron con la Jefatura Departamental de la Policía y con la Secretaría de Seguridad del Municipio para solicitarles mayor presencia de móviles y controles de interceptación en los barrios.