El segundo juicio por el femicidio de Lucia Pérez tendrá su tercera audiencia en el TOC de Mar del Plata, en esta ocasión se espera un debate enfocado en la autopsia y el “empalamiento”
Hoy, jueves 9 de febrero, el segundo juicio que pone en cuestión las circunstancias de la trágica muerte de Lucia Pérez Moreno, adolescente de 16 años, llega a su tercera jornada en la cual se continuará juzgando a los presuntos responsables de cometer un femicidio y abuso sexual, Matías Farias y Juan Pablo Offidani. En esta ocasión, el Tribunal Oral 2 de Mar del Plata, junto a cada una de las partes presentes, se prestarán a oír declaraciones testimoniales propias de los peritos forenses encargados de realizarle la autopsia al cuerpo de la víctima fatal.
Tal como se repite en otros casos de este tipo, el cuerpo de Lucía “habla”. Por este motivo, se dispondrá de un lugar para aquellos cinco médicos que en ese entonces pudieron leer las condiciones del cadáver de Lucía y determinar cuáles fueron los causales de su muerte. Se espera que la audiencia enfoque su presentación en temas sensibles relacionados con la intimidad física de la que fue la víctima fatal en aquel momento. En este marco se mostrarán fotos forenses y se relatarán algunos detalles ocultos.
Por este motivo fue que el Tribunal decidió, junto a las partes, que la audiencia sea “cerrada”, es decir, que tanto los familiares de la víctima (exceptuando a sus padres), periodistas y amicus curiae no estén presentes a la hora del debate. En tanto, la sala de audiencias del segundo piso del TOC 2, este jueves permanecerá cerrada para el grupo de personas que solía frecuentar los debates.
Según el primer peritaje, el consumo de estupefacientes, en particular cocaína, en la casa del acusado Farías esa mañana del sábado 8 de octubre del año 2016 fue lo que causó en Lucía un edema y congestión pulmonar como mecanismo de muerte.
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A su vez, el cuerpo de Pérez pudo revelar que había tenido relaciones sexuales con Farias minutos antes de morir, según los forenses que analizaron estas pruebas, las heridas del cadáver son de carácter vital.
En este marco, la fiscal María Isabel Sánchez, encargada de realizar las investigaciones durante la instrucción, sostuvo que “la falta de consentimiento de la víctima para mantener relaciones, está dada principalmente porque, a partir del consumo de sustancias estupefacientes provistas por su agresor sexual, esta no pudo consentir libremente la acción”.
En cuanto a los testimonios, se espera que se presenten los encargados de realizar los trabajos de la autopsia adjunta en el expediente. Por un lado, los doctores Carrizo, Chiodetti y Bonvici (el único que estará en el TOC 2 en representación del equipo), por el otro, Cabrira, Tinto y Villoldo. La diferencia estuvo reflejada en las heridas internas halladas en el cuerpo de Pérez, las cuales podrían demostrar si las actividades sexuales fueron o no consentidas.
A su vez, Carrizo fue quien interpretó que Lucía había sido empalada y pasó a ser comunicado, erróneamente, por la fiscal Sánchez.
