Por día se consumen más de dos mil millones de taza de café alrededor del mundo, casi como si fuese agua. Conoce los efectos que tiene esta bebida en tu salud.
La bebida descripta como el oro líquido. La capaz de concentrar a los místicos sufíes durante sus rituales religiosos. La bebida más omnipresente alrededor del mundo: el café se sirve diariamente en más de 2 mil millones de tazas.
La infusión es una de las más valoradas y consumidas en todo el terráqueo. Fría, caliente, dulce, amargo, con leche de vaca o vegetal, con crema y hasta con chocolate, es el líquido escogido por excelencia para activar las mañanas de millones de personas.
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Es de general conocimiento que la cafeína te despierta, mantiene activo y hasta puede beneficiar el rendimiento deportivo. Pero lo que pocos saben, o no tienen en cuenta, son los efectos secundarios que podría tener beberla sin moderación, cuantas tazas se pueden tomar por día ¿Qué le pasa a tu cuerpo cuando te tomas el americano doble de la mañana?
Los efectos de la cafeína en el cuerpo pueden empezar incluso antes de siquiera dar el primer sorbo. Inhalar el aroma del café puede contribuir a mejorar la memoria y estimular el estado de alerta, según un estudio realizado en el año 2019 experimentando en 80 jóvenes de entre 18 y 22 años.
Un estudio similar, con fecha de producción del 2018, confirmó que los sujetos obtuvieron mejores resultados en test de razonamiento analítico luego de beber el producto en análisis. Además, agregaron que el producto podía tener un efecto placebo.
“Muchos investigadores recurren a ensayos aleatorios, doble ciego y controlados con placebo para tratar de averiguarlo. Y si nos fijamos en algunos de los estudios sobre dosis más altas de cafeína y cuando se han comparado con un placebo, seguimos viendo un efecto de mejora del rendimiento de la cafeína”, explicó el doctor Mike T. Nelson, investigador y especialista en rendimiento, segundos después de confirmar la probable existencia de que “cualquier suplemento conlleve un efecto placebo”.
En tanto, la cafeína actúa como un estimulante del sistema nervioso central, activando tu estado de alertra y potenciando tu concentración, aunque también puede volverte más irritable y ansioso. Esto tienen que ver con los receptores de adenosina del cuerpo, los cuales regulan el ritmo cardiaco, el flujo sanguíneo y los ciclos de sueño-vigilia.
La cafeína entonces puede llegar a engañar a las células nerviosas y unirse a ellas, impidiendo que estas disminuyan la actividad celular y permitiendo que los neurotransmisores estimulantes del cerebro funcionen a pleno, lo que la convierte en un estimulante del estado de ánimo. No obstante, grandes dosis podrían llegar a provocar ansiedad
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El problema, ¿cuándo debo dejar de beber café?
Esta cuestión es realmente discutida. El efecto de la cafeína se extiende en un tiempo de seis horas, lo que explicaría que si tu ultimo espresso lo bebes a las 4 de la tarde, tu organismo a las 10 de la noche aun tendrá dosis de la sustancia. Algunos defienden el toque de queda de la cafeína, es decir dejar de tomarla, a las 14 o las 15, aunque eso no significa que en la mañana todo esté permitido.
“Veo a mucha gente que se toma tres cafés más o menos seguidos por la mañana. Llegan a los 1.000-1.500 mg antes de la hora de comer y luego dejan de tomarlos. Esa no es una forma sensata de hacer las cosas: se trata de mantener el nivel, sin grandes altibajos. Controla cuándo tienes un pequeño bajón de energía y podrás utilizar tu consumo de cafeína de forma estratégica para ayudarte en los momentos clave”, aclaró Nick Littlehales, entrenador del sueño que trabajo en equipos de futbol de alto nivel.