La problemática tiene lugar en la frontera entre México y Estados Unidos. El muro se construyó para impedir el paso de los inmigrantes, pero esta imponente barrera metálica impide también que la fauna se desplace en su hábitat natural.
El gigante muro ubicado en la frontera entre México y Estados Unidos, actúa como gran amenaza para la biodiversidad. Se construyó para impedir el paso de los inmigrantes, pero esta imponente barrera metálica impide también que la fauna se desplace en su hábitat natural. Alarmados por el impacto en animales como jaguares, osos y leones de montaña, activistas ecológicos unen fuerzas para tratar de proteger la biodiversidad de este corredor.
“Hay corredores que han sido identificados y hay jaguares en esta zona. Estamos muy preocupados por el silencio del gobierno mexicano, que no está haciendo nada para mitigar los efectos de los ecocidios derivados de la construcción de este muro”, explicó José Manuel Pérez, Director de Conservación de Cuenca Los Ojos.
Cabe recordar que, a ambos lados de la frontera, en los estados de Sonora y Arizona, se extienden reservas naturales con paisajes que incluyen desiertos o bosques montañosos y cuyas especies protegidas se topan con toneladas de acero y hormigón.