La joven falleció luego de haber sido arrestada por la Policía de la Moral por llevar mal puesto el velo. Las protestas se intensificaron luego de su velorio.
Las protestas por la muerte de la joven Mahsa Amini tras ser detenida por la Policía de la Moral en Teherán por no llevar bien colocado el hiyab se han extendido hasta la capital del Kurdistán iraní, Sanandaj.
El sábado Amini fue enterrada en su localidad de origen, Aychi, y el acto se convirtió en una manifestación de protesta que fue disuelta por la policía empleando gas lacrimógeno.
Muchos iraníes, incluidos algunos partidarios del gobierno, están expresando su indignación en las redes sociales por la existencia misma de las Patrullas que se encargan de hacer cumplir los códigos de vestimenta, a las que han apodado con el hashtag “Patrullas Asesinas”.