En Nickelsdorf, el mayor paso fronterizo de Burgenland entre Hungría y Austria, se registran cada día hasta 300 personas refugiadas. Un sorprendente aumento de solicitudes experimentado desde el verano que las autoridades relacionan al hecho de que muchos indios, marroquíes y tunecinos se han sumado a las solicitudes de asilo, ya que apenas tienen posibilidades de que se les conceda el derecho de residencia.
Austria ingresó en estado de alerta por un aumento de solicitantes de asilo. En Nickelsdorf, el mayor paso fronterizo de Burgenland entre Hungría y Austria, se registran cada día hasta 300 personas refugiadas.
Un sorprendente aumento de solicitudes experimentado desde el verano que las autoridades relacionan al hecho de que muchos indios, marroquíes y tunecinos se han sumado a las solicitudes de asilo, ya que apenas tienen posibilidades de que se les conceda el derecho de residencia.
Los habitantes de la región también sienten el aumento del tráfico, tal y como confirmó el alcalde de la ciudad, Gerhard Zaplf: “Actualmente llegan muchos inmigrantes al paso fronterizo de Nickelsdorf, pero son pocos los que entran en la ciudad. A veces en grandes grupos. Yo estaba un poco nervioso, porque algunos de ellos fueron detenidos frente a la escuela. Pero estas personas no son peligrosas, quieren ser detenidas, quieren ser transferidas, quieren entrar en nuestro sistema. No veo ningún peligro“.