El actor nació en Londres en 1889 y fue uno de los humoristas más reconocidos del cine mudo durante la Primera Guerra Mundial
El 16 de abril de 1889 nació Charles Spencer ‘Charlie’ Chaplin en Londres, uno de los actores y humoristas más reconocidos en el mundo del cine mudo. Algunas de sus películas más famosas fueron ‘La quimera del oro’ (1925), ‘Luces de la ciudad’ (1931), ‘Tiempos modernos’ (1936) y ‘El gran dictador’ (1940).
La quimera del oro (1925): Interpreta a un solitario buscador de oro que llega a Alaska, a principios de siglo, en busca de fortuna. Una fuerte tormenta de nieve le llevará a refugiarse en la cabaña de un bandido. En 1942 fue reestrenada en versión sonora. Con esta aproximación a la llamada “Fiebre del Oro”, el director y actor entregó una de sus obras más redondas, llena de poesía, emotividad y ternura. En su reseña para Chicago Reader, Dave Kehr calificó: “Esto es Charlie por antonomasia y nadie se lo debe perder”.
Luces de la ciudad (1931): Un pobre vagabundo (Charles Chaplin) pasa mil y un avatares para conseguir dinero y ayudar a una pobre chica ciega (Virginia Cherrill) de la que se ha enamorado. Luces de la Ciudad forma parte de la lista de los 10 mejores filmes de la historia de la National Board of Review, y aunque contiene algunos elementos sonoros, es considerada una película muda. En su reseña para The New York Times, Mordaunt Hall apuntó: “Es una película elaborada con admirable habilidad artística, y mientras Chaplin se inclina para conquistar, como suele hacer normalmente, logra el éxito”.
Tiempos modernos (1936): Extenuado por el frenético ritmo de la cadena de montaje, un obrero metalúrgico acaba perdiendo la razón. Después de recuperarse en un hospital, sale y es encarcelado por participar en una manifestación en la que se encontraba por casualidad. En la cárcel, también sin pretenderlo, ayuda a controlar un motín, gracias a lo cual queda en libertad. Una vez fuera, reemprende la lucha por la supervivencia en compañía de una joven huérfana a la que conoce en la calle. Con Tiempos Modernos, Chaplin entregó una ingeniosa y crítica mirada al periodo de industrialización. En su reseña para Time Out, Derek Adams afirmó: “La ingenuidad política y filosófica de Chaplin aquí es tan notable como su don para la pantomima”.
El gran dictador (1940): Un humilde barbero judío que combatió con el ejército de Tomania en la Primera Guerra Mundial vuelve a su casa años después del fin del conflicto. Amnésico a causa de un accidente de avión, no recuerda prácticamente nada de su vida pasada, y no conoce la situación política actual del país: Adenoid Hynkel, un dictador fascista y racista, ha llegado al poder y ha iniciado la persecución del pueblo judío, a quien considera responsable de la situación de crisis que vive el país. Paralelamente, Hynkel y sus colaboradores han empezado a preparar una ofensiva militar destinada a la conquista de todo el mundo. Un manifiesto audaz al nazismo, El Gran Dictador es una de las mejores películas antibélicas y una de las más elogiadas del director. En su reseña para Chicago Sun-Times, Roger Ebert aseguró: “El trabajo más serio, trágico y humano de Chaplin”.
Un día como hoy, pero de 1889, el mundo recibió a uno de los grandes exponentes del cine que traspasó las barreras del séptimo arte, Charlie Chaplin.