Spinetta Dante conmueve al revelar una emotiva anécdota sobre el legendario músico argentino, Luis Alberto, en una reciente entrevista. La historia desconocida que conmocionó a todos
El legado emocional detrás de una guitarra: la emotiva narrativa de Dante Spinetta
Dante Spinetta, reconocido músico y figura en la escena argentina, compartió una conmovedora historia durante su participación en el programa de Nacho Elizalde en Luzu TV. En un momento distendido, entre risas y charlas sobre guitarras, Dante reveló una anécdota única sobre su padre, “El Flaco” Spinetta, Gustavo Cerati y Ricardo Mollo, que capturó la atención de todos los espectadores.
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“Mi primera guitarra fue una Telecaster mexicana. Dije ‘me voy a comprar mi viola porque estoy tocando con la de mi viejo'”, contó Dante, revelando cómo su padre quedó fascinado con el instrumento. Sin embargo, el destino de esa guitarra fue particular: luego de que Dante optara por otra guitarra regalada por su padre, la Telecaster quedó olvidada en casa, hasta que Luis Alberto Spinetta la usó en un concierto con Socios del Desierto y la destrozó. Una acción que Ricardo Mollo se encargó de reparar, iniciando así una historia emocional ligada al instrumento.
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La narrativa tomó un giro inesperado cuando, tras el trágico episodio de la internación de Gustavo Cerati, Luis Alberto dejó la guitarra junto al músico como un gesto de apoyo y energía. “Falleció mi viejo, falleció Gustavo, y la viola volvió a mí. Mi primera guitarra, después de toda esa energía…”, compartió Dante, enfatizando la carga emocional que rodeaba a ese objeto.
En otro ámbito musical, Ricardo Mollo, líder de Divididos, reveló en una entrevista para “Doble Bobina” los cambios en su equipamiento para los shows de la banda. Entre risas, explicó cómo la reorganización de su pedalera, más compacta, le brindó mayor comodidad y estabilidad durante las presentaciones. Comentó sobre las mejoras en la disposición de los instrumentos en el escenario, resaltando la importancia del equilibrio para evitar accidentes durante el espectáculo.
Estos relatos muestran cómo la música, los objetos y las decisiones técnicas pueden estar cargados de significados emocionales y experiencias profundas para los artistas, revelando un lado íntimo y personal detrás de la escena pública.
Ambos músicos, Dante Spinetta y Ricardo Mollo, ofrecen una mirada única sobre sus historias y la evolución de su arte, trascendiendo lo meramente técnico para adentrarse en el mundo de las conexiones humanas y los vínculos emocionales en el universo musical.
La narrativa de Dante Spinetta sobre la guitarra, más que un relato sobre un instrumento, resalta la profundidad de las conexiones humanas en el mundo de la música. El vínculo entre un padre y un hijo, entrelazado con la pasión por la música, se convierte en un relato emotivo que resuena en quienes aprecian la obra de Luis Alberto Spinetta.
La elección de Spinetta de dejar la guitarra como un amuleto para la recuperación de Gustavo Cerati destaca la empatía y la solidaridad entre artistas, trascendiendo las rivalidades o diferencias que a veces se asumen en el ámbito musical. Es un recordatorio de la camaradería y el apoyo mutuo que existe entre aquellos que comparten la pasión por la música.
Por otro lado, la revelación de Ricardo Mollo sobre los ajustes en su equipo para los conciertos de Divididos ofrece una mirada distinta pero igualmente valiosa. Detrás de la escena pública, los artistas a menudo se encuentran lidiando con desafíos técnicos que afectan su desempeño. La narrativa de Mollo sobre su pedalera y la disposición de los instrumentos revela la importancia de la comodidad y la seguridad durante las actuaciones en vivo, detalles que, aunque parezcan menores, impactan significativamente en la calidad del espectáculo.
La risueña complicidad entre Mollo y los entrevistadores durante la conversación refleja la humanidad y la sencillez que a menudo se encuentran detrás de las figuras icónicas de la música. Los ajustes técnicos se entrelazan con anécdotas humorísticas, mostrando un lado más ligero y cercano de estos músicos que, aunque sean reconocidos por su genialidad artística, mantienen una conexión con la cotidianidad y la simpleza.
Estas historias subrayan que la música no solo es el resultado final escuchado por los fanáticos, sino un viaje lleno de experiencias personales, conexiones emocionales y cambios técnicos que moldean el proceso creativo. Desde las memorias familiares ligadas a un instrumento hasta los ajustes minuciosos en el escenario, cada detalle cuenta una historia única que enriquece la apreciación de la música y su impacto en la vida de quienes la crean y la disfrutan.
