Se trata del “basurero petrolero” de Claudio Urcera, padre de Manuel Urcera, quien pagará la boda de su hijo con Nicole Neumann.
La reciente pedida de matrimonio de Manuel Urcera a la modelo Nicole Neumann tuvo un incómodo impacto no deseado en la familia del piloto, ya que la relevancia que tomó su relación expuso el “basurero petrolero” que el suegro de la conductora, Claudio Urcera, mantiene y por el que fue denunciado por contaminación en la Patagonia.
Por medio de la empresa COMARSA, el cuestionado empresario se dedica al “supuesto tratamiento de la basura petrolera del fracking”, pero en realidad el predio que posee en el Parque Industrial de Neuquén sólo se encarga de recibir “montañas gigantescas de basura petrolera acumuladas a cielo abierto”, denunció el integrante de la Asociación de Abogados Ambientalistas Rafael Colombo.
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El letrado se acercó hasta las instalaciones de Urcera y advirtió que es “una planta que luce en un estado absoluto de abandono”, pero señaló que de todos modos hay “personal y maquinarias trabajando”. Lindante con el predio hay un barrio que se ve seriamente afectado por las actividades irregulares de la firma del suegro de Nicole Neumann.“La empresa utiliza terrenos públicos que luego van a transformarse en un pasivo ambiental de dimensiones colosales”, agregó Colombo en un video difundido en redes sociales.
Cuando el abogado ambientalista habla de basura petrolera se refiere al acopio de barros con hidrocarburos, aguas residuales y químicos, exponiendo así la salud de la población y el ambiente. La situación también es activamente denunciada por distintas comunidades mapuches de la Patagonia.
Las actividades de COMARSA están en la mira de la Justicia, ya que una denuncia de la Asociación de Abogados Ambientalistas calculó que el pasivo ambiental de estos predios asciende a unos 5 mil millones de pesos.
Días atrás, la organización de letrados, en conjunto con la Asamblea por los Derechos Humanos de Neuquén, fue admitida como querellante de la investigación penal en curso en los basureros petroleros de Vaca Muerta. La misma pesa sobre COMARSA, las corporaciones petroleras que operan en Vaca Muerta y los funcionarios públicos del Estado provincial.La solicitud de querella fue aceptada por la Fiscalía especializada en Delitos Ambientales del Ministerio Público Fiscal de Neuquén.
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En el expediente se investiga la posible comisión del delito de contaminación peligrosa para la salud y el ambiente por parte de la empresa Compañía de Saneamiento y Recuperación de Materiales S.A. (COMARSA), así como la posible responsabilidad de los funcionarios públicos encargados de supervisar dicha actividad.
En la causa existe documentación oficial, informes y testimonios en donde, por una parte, se exponen abiertamente una serie de irregularidades en el accionar de COMARSA, en cuanto al tratamiento de los residuos petroleros; y, por otra parte, el conocimiento de estos incumplimientos reiterados por parte de las autoridades públicas competentes.
Dentro del voluminoso legajo de la investigación penal, se destacan más de 1180 fojas que contienen las actas de las inspecciones realizadas a COMARSA por funcionarios estatales entre 2013 y 2021. También se encuentra el historial de las infracciones constatadas por la autoridad de aplicación, los registros del programa de trazabilidad de residuos (incorporados en 2017), estudios de emisiones de gases de hornos pirolíticos y manifiestos de la cadena de custodia. Se ha comprobado que la cantidad de residuos peligrosos que genera el fracking hace que su correcto tratamiento sea imposible.
La decisión judicial ratificó la entidad, gravedad y cantidad de conductas irregulares detalladas cometidas por la empresa COMARSA. La misma se apropió ilegalmente de tierras fiscales para depositar en ellas residuos peligrosos provenientes de hidrocarburos no convencionales. También son evidentes las reiteradas declaraciones falaces sobre el volumen de los residuos acopiados y el acopio de basura por sobre las capacidades de tratamiento. La violación a las suspensiones por mal funcionamiento de hornos es de especial gravedad, ya que ponen en peligro a la población con emisiones de dioxinas y material particulado.