El presidente de Rusia, Vladimir Putin, busca abrir un nuevo frente en Bielorrusia, al tiempo que volvió a bombardear Kiev con drones. Según las autoridades locales, más de veinte han sido detectados en la capital ucraniana y al menos quince consiguieron ser derribados.
El presidente de Rusia, Vladimir Putin, busca abrir un nuevo frente en Bielorrusia, al tiempo que volvió a bombardear Kiev con drones. Según las autoridades locales, más de veinte han sido detectados en la capital ucraniana y al menos quince consiguieron ser derribados.
Mientras, las tropas ucranianas emplean todo tipo de vehículos para transportar suministros al frente. En algunas zonas de Bajmut, en la región de Donetsk, fuerzas rusas y ucranianas combaten casi viéndose las caras. La ciudad se ha quedado vacía de sus cien mil habitantes.
“Esta claro para nosotros que Vladímir Putin necesita Bajmut como regalo de Año Nuevo”, comentó un comandante ucraniano. “En su discurso de Año Nuevo quiere anunciar una gran victoria. Y la propaganda rusa está haciendo de todo para exagerar la importancia militar de Bajmut, que en realidad es pequeña”, finalizó.
En Kiev los ciudadanos acuden a los centros de ayuda conocidos como “puntos de invencibilidad”, en las horas en las que se producen cortes de electricidad por los bombardeos rusos. El Reino Unido anunció en las últimas horas, la entrega a Ucrania de cientos de miles de proyectiles de artillería dentro de un contrato de más de 280 millones de euros.