La primera ministra, Élisabeth Borne, y la alcaldesa de París, Anne Hidalgo, encabezaron el homenaje, junto con familiares de las víctimas, entre los que hubo muchos gestos de emoción.
París vivió en las últimas horas un nuevo homenaje a las víctimas de los atentados terroristas del 13 de noviembre de 2015, que dejaron 130 víctimas mortales y más de 400 heridos. Estos ataques terroristas han sido lo más graves ocurridos en Francia.
El Estadio de Francia en Saint Denis, en la periferia de la capital, varios cafés cuyas terrazas fueron tiroteadas y, especialmente, el local de conciertos y espectáculos Bataclan (donde murieron 90 de las víctimas) fueron visitadas sucesivamente por el cortejo.
Este fue el primer aniversario tras la sentencia del juicio por los atentados, que concluyó con la condena a cadena perpetua y sin posibilidad de liberación para Salah Abdeslam, el único superviviente de los comandos que cometieron los atentados. Otros acusados fueron condenados a prisión de por vida, aunque con la posibilidad de liberación anticipada al cabo de largos períodos de tiempo.