El arquero de la Selección Argentina Dibu Martínez visitó Francia por primera vez desde la consagración en el Mundial de Qatar 2022. Fue figura y su equipo accedió a la semifinal de un torneo europeo después de 42 años.
El arquero argentino Emiliano Martínez se agrandó a pesar del hostil recibimiento que recibió en el Estadio Pierre-Mauroy y Aston Villa accedió a la semifinal de la Conference League.
Atajó dos penales, justamente a franceses (Nabil Bentaleb y Benjamin André) para eliminar a Lille en una infartante definición y meter a su equipo entre los cuatro mejores de Europa después de 42 años (desde 1982, cuando se coronó campeón).
Y fue posible porque se vistió de héroe en lo que fue su primera vez en Francia tras la consagración en el Mundial de Qatar 2022.
“El enemigo público número 1. Puede esperar una recepción hostil por parte del Stade Pierre-Mauroy. Los franceses tendrán una oportunidad real de expresar algo de su enojo anterior. Su actuación por sí sola lo hubiera convertido en una figura despreciada en Francia, pero fue su reacción durante las celebraciones lo que cimentó su reputación vilipendiada y rápidamente le valió el apodo de ‘el argentino más odiado de Francia'”, había publicado el medio Get Frenchh Football News en la previa del partido.
Una situación que finalmente ocurrió con insultos y silbidos cada vez que el ex-Independiente tocó la pelota.
Tras el 2-1 de la ida en Inglaterra, la serie entre Lille y Aston Villa quedó igualada (3-3) con los goles de Yusuf Yazici y Benjamin André que dejaron sin opciones a un Dibu Martínez que se lució con dos tremendas atajadas, una con la cara, pero que después recibió su primera tarjeta amarilla por demora en la reanudación del juego, a los 38 minutos, y el descuento agónico de Matthew Cash, producto de un error de Lucas Chevalier.
Ya en los penales, Dibu Martínez se lució con otro de sus típicos shows -para sacar de las casillas a su rivales- que le provocaron su segunda tarjeta amarilla. Todos los corazones de Aston Villa se paralizaron en un primer momento, pues más de uno no se acordaba que el nuevo reglamento borra las amonestaciones durante los 90 minutos reglamentarios y la prórroga.
Así, el equipo de Unai Emery jugará la semifinal de la Conference League frente al vencedor de Fenerbahce-Olympiacos (3-2 para los griegos en la ida).