En los alrededores de la localidad liberada de Limán, en Donetsk, los equipos de desminado ucranianos se esmeran por hacer que el área sea segura. En Moscú, tras firmar las leyes que ratifican la anexión de las cuatro regiones ucranianas.
Las fuerzas ucranianas siguen ganando terreno en las zonas ocupadas por Rusia. Poco después de que Kiev anunciara avances en la región de Lugansk, tras sus éxitos en Jersón y Járkov, el presidente ruso, Vladímir Putin, aseguraba que la situación militar se “estabilizará” en los territorios ucranianos que reclama como rusos.
En los alrededores de la localidad liberada de Limán, en Donetsk, los equipos de desminado ucranianos se esmeran por hacer que el área sea segura. Cabe recalcar que, la ciudad sigue sin agua, electricidad y gas. Sus habitantes rememoraron los días de ocupación mientras hacen cola para recibir alimentos y ayuda médica.
Por su parte, en Moscú, tras firmar las leyes que ratifican la anexión de las cuatro regiones ucranianas, Putin emitió un decreto para poner la central nuclear de Zaporiyia, la mayor de Europa, bajo jurisdicción rusa. La planta está bajo control del Ejército invasor desde marzo.