Simba “el Oficial” Maphori acabó con la vida de cuatro mujeres, incluyendo a su novia, en Botswana
La historia del criminal Simba Maphori, más conocido bajo el temido apodo de “El Oficial” como consecuencia de su pasado laboral como miembro del ejército, es sin dudas una de las más escalofriantes de Africa, dado a que este fue un asesino serial que se dispuso a acabar con la vida de un total de cuatro mujeres, entre las que se encontró su novia, quien fue la primera víctima, aunque también se especula que Mamphori mantuvo una relación amorosa con cada una de las jóvenes que atacó hasta la muerte.
Fue un 2 de abril del año 2019 que policías del país africano de Botswana, donde vivía el asesino, se encargaron de arrestar a Mamphori, que en ese momento tenía apenas 31 años, por cada uno de los homicidios que había cometido en los últimos años. En tanto, el ex oficial del Ejercito resultó puesto bajo las manos de la Justicia de Africa luego de conocerse el crimen de la que fue su última víctima fatal, una mujer de 34 años, pocos días antes del arresto.
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La joven de 34 años, víctima fatal de Mamphori, fue reconocida como su novia oficial y “el Oficial” se había encargado de apuñalarla hasta la muerte utilizando un destornillador. Este hecho tuvo lugar en Gaborone, ciudad de Botswana, y el asesino está acusado de matar a otras tres mujeres en Mahalapye y la misma Gaborone, cada una de ellas habrían sido supuestamente parejas sentimentales y su muerte se produjo de la misma manera: todas apuñaladas.
Una semana antes de ese hecho, había matado a puñaladas a otra mujer de 39 años, al tiempo que los otros dos asesinatos los cometió en 2016 y 2018. La Policía sospechaba que Mamphori salió con las cuatro mujeres antes de asesinarlas.De todas maneras, ese detalle es un misterio hasta el día de hoy, porque el múltiple homicida mantuvo la calma y no dijo nada cuando compareció ante el tribunal. En un momento determinado, el detenido se volvió violento e intentó arrebatarle la cámara de las manos a un fotógrafo que intentaba tomarle una foto cuando salía de la Corte.
Mamphori también presentó una breve demanda contra el periodista, a pesar de que estaba esposado de pies y manos. El trabajador de prensa se dio a la fuga y logró escapar. Mamphori luego pidió al tribunal que lo enviara a un examen mental, porque no podía creer que hubiera cometido los asesinatos, detalle que sorprendió a los jueces y a los presentes.
