La misión de asistencia Naciones Unidas en Afganistán afirmó que la mayoría de victimas del ataque del viernes en la capital eran niñas y mujeres jóvenes. Además, hubo 83 heridos.
La cifra de muertos fue elevada a 53 por la la Misión de Asistencia de la ONU en Afganistán (Unama), y a 83 la de los heridos por el atentado suicida perpetrado el pasado viernes en un centro educativo en Kabul.
Es importante mencionar que, la escuela se sitúa en una zona en la que residen principalmente miembros de la discriminada comunidad chií hazara. Esta misión de Naciones Unidas advirtió que “es probable” que los números de víctimas continúen aumentando.
Los talibanes se han negado a reabrir oficialmente las escuelas de secundaria para niñas mayores de 12 años en la mayor parte del país, pero en ciudades como Kabul, algunas adolescentes han seguido frecuentando academias y centros privados.