Esta semana OpenAI, la empresa detrás de la inteligencia artificial conversacional ChatGPT y el motor generativo Dall-E, entre otros, celebró su primera conferencia de desarrolladores en San Francisco. El evento fue, en cierto modo, la coronación de la empresa como el nuevo gigante tecnológico, el nuevo espejo en el que se miran las startups de
Esta semana OpenAI, la empresa detrás de la inteligencia artificial conversacional ChatGPT y el motor generativo Dall-E, entre otros, celebró su primera conferencia de desarrolladores en San Francisco. El evento fue, en cierto modo, la coronación de la empresa como el nuevo gigante tecnológico, el nuevo espejo en el que se miran las startups de Silicon Valley.
Con los cofres llenos gracias a la inversión milmillonaria de Microsoft y el éxito de ChatGPT, que a finales de este mes cumplirá un año, la empresa ha conseguido convertirse en el máximo referente a la hora de hablar de inteligencia artificial. En el evento de San Francisco dejó clara su intención no sólo de afianzar esa percepción, sino de maniobrar para que el lucrativo mercado que han abierto sus diferentes herramientas no se escape.
Los dos grandes anuncios del día fueron GPT-4 Turbo, una nueva versión del modelo de lenguaje que da vida a ChatGPT y que muchas empresas utilizan en sus herramientas de inteligencia artificial, y la GPT Store, una tienda operad por OpenAI que permitirá a cualquier desarrollador crear y vender acceso a inteligencias artificiales personalizadas.
El primer anuncio es fácil de entender. Se trata de una versión del modelo de lenguaje más avanzado de la compañía que será capaz de entender contextos más complejos. Aunque pensamos en ellos como motores capaces de entender y devolver palabras en lenguaje natural, los modelos largos de lenguaje operan con tokens, cadenas de texto que suelen equivaler a una palabra, aunque no siempre lo hacen, y sobre los que realizan un complejo análisis estadístico.
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Cuanto más largo es un texto -por ejemplo una pregunta que se le hace a ChatGPT- más complejo resulta para la inteligencia artificial considerar todos los elementos necesarios en la respuesta que da. Cuanto más larga es una conversación, más difícil es “recordar” de lo que se ha hablado y tenerlo en cuenta en futuras respuestas.
GPT-4 Turbo es una versión de GPT-4 que puede procesar mucho más tokens de forma continua. 128.000 par ser exactos, lo que equivale, más o menos, a 300 páginas de un libro. Hasta ahora, la versión más avanzada disponible de GPT4 sólo era capaz de procesar 35.000 tokens, así que el salto es considerable.
Además de entender un contexto mayor, GPT4- Turbo es también más preciso a la hora de seguir instrucciones, más barato (un centavo de dólar por entradas de texto de 1.000 tokens y tres centavos de dólar por cada 1.000 tokens en respuestas) y multimodal, lo que quiere decir que automáticamente salta a la inteligencia artificial generativa Dall-E, por ejemplo, si es necesario generar una imagen como parte de la tarea.
OPENAI CHATGPT UN TIENDA DE INTELIGENCIAS ARTIFICIALES
El segundo anuncio es más ambicioso. Desde la llegada del modelo de lenguaje GPT-3 y el despertar de la fiebre de la inteligencia artificial en Silicon Valley, muchas startups han creado sus modelos de negocio básicamente poniendo maquillaje sobre las herramientas de OpenAI.
Para tener más control sobre el fenómeno, la compañía ahora ha hecho mucho más fácil el proceso de personalizar una inteligencia artificial conversacional como ChatGPT de acuerdo a los parámetros y requisitos que necesite un usuario.
Hay que buscarle una palabra a lo PERDIDO y TONTÍSIMO que me siento cuando ChatGPT no funciona.
¿¿¿Pero cómo podíamos vivir sin esto antes???
Me siento ya totalmente dependiente de él. pic.twitter.com/FVnrP7ZCF3
— Javi López ⛩️ (@javilop) November 8, 2023
No sólo eso, permitirá vender acceso a estas inteligencias artificiales en una tienda propia, llevándose un porcentaje. Algunos de los ejemplos que OpenAI demostró durante la conferencia incluían asistentes capaces de enseñar escritura creativa, explicar las reglas de juegos de mesa o cómo quitar todo tipo de manchas de la ropa, enseñar técnicas de negociación o crear y enviar a domicilio pegatinas creadas simplemente hablando con el modelo en lenguaje natural.
Lo más atractivo de esta idea es que el proceso de personalización no requiere conocimientos de programación. Es posible crear una versión de ChatGPT personalizada y con diferentes funciones simplemente hablando con un modelo conversacional.
La tienda y los detalles sobre cómo funcionarán los pagos se harán públicos a finales de este mes, coincidiendo con el cumpleaños de ChatGPT.