“Lo único que pedimos es justicia” expresó una de las hermanas
Uriel Tapia de 18 años asesinó a su propia madre y a su abuelo el miércoles de la semana pasada en la vivienda que compartían en el barrio Bernardino Rivadavia.
Una de las hermanas de la mujer asesinada y tía del parricida asegura que el doble crimen estaba completamente premeditado. Además, buscarán interponer un perito de parte que participe de las pericias psicológicas que le practicarán a su propio sobrino.
“Saian cortó el teléfono, soltó al perró, tenía un pasaje que había sacado para irse. Decían que estaba fuera de sí, pero hay un video en el que se lo ve muy tranquilo cuando lo detienen”, enumeró.