María Cramer, reportera del medio estadounidense realizó un recorrido gastronómico en Buenos Aires donde se topó con un plato típico de La Feliz
Mar del Plata llegó a The New York Times tras el recorrido de la reportera María Cramer, quien tras su recorrido por la ciudad de Buenos Aires durante “36 horas”, llegó a un restaurante porteño en el cual destacó en primer lugar un plato típico de La Feliz. ¿De cuál se trata?
“Para saborear su camino alrededor de Argentina, la segunda nación más grande de América del Sur, sin hacer una larga caminata, vaya a Roux, también en Recoleta. Si bien la comida no es estrictamente argentina, el chef Martín Rebaudino, que se hizo un nombre en el cercano restaurante de alta cocina Oviedo, obtiene ingredientes de todo el país”, comenzó Cramer.
Acto seguido enumeró cada una de las recetas de cada provincia, destacando primeramente la marplatense. “Las anchoas son de la ciudad costera de Mar del Plata, el azafrán es de la provincia noroccidental de Mendoza y los langostinos son de Santa Cruz, en la Patagonia. Las mollejas, o mollejas, servidas con un raviolo grande y aterciopelado que tiene una yema de huevo trufada en el interior y está cubierto con espuma, son un punto culminante en un menú lleno de platos inventivos”.
Finalmente cerró con el valor para degustar este menú en la ciudad de Buenos Aires. “La carta de vinos es amplia y el servicio es impecable. Cena para dos, sin bebidas, alrededor de 24.000 pesos”.
Tras probar la comida de Mar del Plata, la reportera de The New York Times siguió su recorrido en Buenos Aires. “Después de la cena, diríjase a menos de una milla hasta Presidente Bar, que puede parecer exclusivo e imponente mientras camina a través de una puerta alta de hierro forjado hacia una habitación poco iluminada con techos altos, paredes de color caoba y candelabros de cristal”.
Inmediatamente destacó: “Pero el lugar está dirigido por meseros amigables y conocedores que felizmente entrarán en detalles sobre los cócteles, que van desde los tradicionales Negronis hasta inventos kitsch como el Buenos Aires Zombie, un cóctel de ron mezclado con frutas tropicales, absenta y amargos servido en una réplica de cerámica del obelisco en la Avenida 9 de Julio. Presidente Bar ofrece un entorno magnífico donde se fomenta el disfraz, pero la pretensión es inexistente”.
Para cerrar su estadía probando la gastronomía de la ciudad de Buenos Aires dijo: “Puerto Madero, un barrio remodelado junto al muelle a unos 10 minutos a pie de San Telmo, se ha convertido en uno de los destinos turísticos más concurridos de la ciudad, gracias a puntos de referencia como el Puente de la Mujer, un elegante puente peatonal diseñado por el renombrado arquitecto Santiago Calatrava, y el ARA Presidente Sarmiento, un barco museo que se balancea en el río Darsena Sur junto a una larga línea de ruidosos, Restaurantes llenos. A menos de media milla a lo largo del río, lejos de la multitud, se encuentra Estilo Campo, una fantástica parrilla (un asador argentino, que literalmente significa parrilla abierta) con vistas al río y camareros con pañuelos y cinturones al estilo de gauchos, para el deleite de los turistas. Pero el chorizo preparado por expertos, las mollejas crujientes y el jugoso filete de falda no dejan dudas de que estás en una auténtica parrilla argentina, y la carta de vinos es amplia. Almuerzo para dos, unos 18.000 pesos”.