El vehiculo fue puesto en órbita este 24 de julio por la agencia espacial de ese país.
Los escombros del gigante cohete propulsor chino Long March 5B podrían caer sobre la Tierra entre el sábado y el próximo lunes, luego de haber sido puesto en órbita el pasado 24 de julio, lo que generó críticas por la falta de planificación y seguridad, informaron expertos y medios especializados.
El cohete tenía por misión llevar un módulo que se iba a acoplar a la estación espacial china Tiangong, lo cual fue realizado con éxito el 24 de julio pasado, pero la etapa central del cohete, de 21 toneladas métricas, orbita la Tierra y desciende gradualmente hacia un “reingreso descontrolado”.