Una ONG de Israel busca que el país trasandino sea su socio en un ambicioso proyecto espacial. La participación le costaría a Chile unos 15 millones de dólares, y podría llevar su bandera a la Luna.
El exclusivo grupo de países que han llegado a la Luna es chico. Nueve naciones lograron orbitar nuestro satélite, cinco pudieron depositar en su superficie naves no tripuladas y una sola consiguió llevar a personas.
Sin embargo, este selecto conjunto podría agrandarse: Chile tiene la posibilidad de anotar su nombre en la lista gracias a una participación en un proyecto espacial de Israel.
De concretarse la ambiciosa misión, el país transandino también lograría ser el segundo país en llegar al lado más lejano, el oscuro, de la Luna.
Se trata Beresheet 2, un proyecto de la ONG israelí SpaceIL que tiene el objetivo de lanzar una nave espacial para que no solo orbite la Luna, sino también conseguir alunizar.
La misión cuenta con el apoyo de la NASA, de la Agencia Espacial de Alemania y de los Emiratos Árabes Unidos. Además, existen conversaciones con Australia, Francia, Marruecos, Suecia y Suiza para que ingresen al nivel educativo o científico del proyecto.