Tenía 87 años y fue el segundo campeón mundial de la historia. Hoy también se celebra, justamente, el Día del Boxeador Argentino.
Lo informó su hijo a través de las redes sociales: “Así te voy a recordar viejo! Con los brazos en alto como un campeón. Gracias por tus enseñanzas y por inculcarme tus valores. Descansa en paz”.
A pesar de su dura infancia, Accavallo se convirtió en boxeador profesional y protagonizó uno de los momentos más icónicos en la historia del boxeo nacional en 1966. Venció en Tokio al japonés Katsuyoshi Takayama, convirtiéndose en campeón mundial de peso mosca AMB y CMB, el segundo en la historia del pugilismo argentino tras la consagración de Pascual Pérez en 1954 en la misma ciudad.