La alimentación intuitiva que se hizo viral en TikTok durante las últimas semanas trata de una relación cuerpo-mente que requiere confianza en las señales que envía el mismo respecto al hambre.
Muchas veces las dietas hacen foco en tomar al reloj como indicador para comenzar a comer o ignorar las señales que el cuerpo nos envía respecto al hambre, aunque ahora la ciencia ya no cree que sea la mejor forma. Una investigación realizada por científicos norteamericanos indicó que esta es una de las variantes que podrían impedir mantener un peso adecuado.
Decenas de dietas circulan por minuto en internet, varias de ellas señalando el ignorar la sensación de hambre, otras en cantar calorías y unas más disminuyendo ingestas, mientras que otras establece el consumo de alimentos en ciertos momentos del día. No obstante, una investigación realizada por la Universidad de Rutgers en Nueva Jersey, señaló lo importante que es confiar en nuestro apetito y comer solo cuando sentimos hambre.
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Se trata de la “alimentación intuitiva”, que indica que nuestro propio organismo es el que indica cuando comer y que ingerir. Esta técnica, según los expertos, contribuye a mejor la relación entre la salud psicológica y física.
Esta metodología se basa en “estar en sintonía con las señales de nuestro cuerpo” más que seguir “la última dieta o plan de alimentación de moda”, creando un balance en bajar de peso y mantener la salud mental.
Para conseguir los resultados, los científicos se encargaron de hacer una encuesta en línea que abarcó a más de 6 mil adultos jóvenes de ocho países diferentes, donde se respondieron preguntas sobre la autoestima y el índice de masa corporal, llegando a una conclusión: existen tres estilos de alimentación, estas son la intuitiva, la emocional y la restringida.
Según la explicación, la alimentación de carácter emocional responde a emociones frustradas internas, como el estrés o la tristeza. La restringida se encarga de limitar rígidamente la ingesta con el estricto objetivo de perder o mantener el peso. Por último, la intuitiva parece mantener más contentos a los usuarios con su cuerpo, sumando autoestima y bajando de peso.
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En oposición, los adultos alimentándose en base al estilo restringido y emocional se asocian a menos satisfacción corporal y, por ende, menos autoestima, incluyendo más peso. “Los mensajes culturales sugieren constantemente que es importante ignorar las señales de hambre y saciedad de nuestro cuerpo, pero confiar en él y comer cuando sentimos hambre parece ser lo mejor para nuestra salud psicológica y física”, explicó al respecto la doctora Charlotte Markey, investigadora principal del estudio.
“Deberíamos intentar estar más en sintonía con nuestra propia fisiología que con la última dieta o plan de alimentación de moda”, explicó la experta al ver los resultados de su investigación.
Por otro lado, en la publicación de la revista British Journal of Health Pshychology los investigadores sostuvieron que los estilos de alimentación pueden relacionarse directamente con la forma en la que los individuos se sienten consigo mismo.
Como conclusión, se destacó la alimentación intuitiva como una filosofía de vida que anima a crear una fuerte conexión entre el cuerpo y las señales de hambre y satisfacción, comiendo cuando se siente hambre y dejar de hacerlo cuando ya no se siente.
