Las dos parejas caminaron bajo los aplausos de la multitud y contemplaron juntos las ofrendas florales a la reina Isabel II, fallecida el jueves.
Una larga brecha de más de 30 meses que solo ha logrado romper la muerte de Isabel II, la abuela de los dos hermanos, íntimos desde la muerte de su madre y completamente separados el uno del otro desde la marcha de Harry y su familia a EE UU en marzo de 2020.
Tanto los Sussex como los Gales permanecieron varios minutos en la puerta del castillo leyendo las dedicatorias y viendo todos los homenajes que ha querido rendir estos días el pueblo británico a la monarca a través de flores, velas o dibujos.
Esta aparición de las dos parejas juntas sucedió luego de que se confirmara que el funeral de Estado por la difunta reina será el próximo 19 de septiembre a las 11:00 en la abadía de Westminster en Londres, según anunció el Palacio de Buckingham. Esa fecha será jornada festiva en todo el Reino Unido, como autorizó hoy en una de sus primeras órdenes el nuevo monarca, Carlos III.
Antes del funeral, habrá una capilla ardiente de cuatro días en Westminster Hall, el edificio más antiguo del complejo del Parlamento, adonde los ciudadanos podrán acudir para presentar sus respetos.