Decenas de miles de israelíes han participado en las protestas antigubernamentales, celebradas en las últimas horas en Tel Aviv contra los planes de reforma del sistema judicial. Las calles fueron bloqueadas en los puntos más populares de la capital.
Varios israelíes se manifestaron en Tel Aviv, en las últimas horas, contra los planes de la reforma del sistema judicial. Afirman que los planes normativos del gobierno debilitarán el Tribunal Superior de Justicia y afianzarán el control político sobre los nombramientos judiciales.
Las protestas se replicaron además en las ciudades de Haifa, Jerusalén, Netanya y Beer Sheva, y por primera vez, también se registraron pequeñas manifestaciones en asentamientos israelíes en Cisjordania ocupada.
Los ciudadanos expresaron su rechazo contra los planes de reforma judicial del nuevo Gobierno de Netanyahu, que busca otorgar más poder al Ejecutivo en detrimento de la Justicia, cuya independencia se vería debilitada.
Entre otras cuestiones, el plan que impulsa el ministro de Justicia, Yariv Levin, prevé la denominada “cláusula de anulación”, que implicaría que una mayoría simple de diputados en el Parlamento pueda derogar los fallos emitidos por el Tribunal Supremo.
Múltiples autoridades y personalidades israelíes de distintos sectores de la sociedad han expresado su malestar por los planes de reforma, incluyendo un grupo importante de economistas y trabajadores de empresas de alta tecnología, que temen que inversores extranjeros comiencen a abandonar el país ante la erosión de su democracia.
