El abogado de uno de los acusados se había acercado a la prensa minutos antes del comienzo del segundo juicio para compartir su postura y criticar las manifestaciones de los familiares de Lucia Pérez.
El ultimo martes 7 de febrero comenzó el segundo juicio del caso Lucia Pérez en Mar del Plata, volviendo a debatirse el abuso sexual y femicidio de la joven de 16 años a manos de Juan Pablo Offidani y Matias Farías. En este marco, el abogado particular del primero confirmó que la estrategia de la defensa se centrará en llegar a la misma solución que se había alcanzado en el juicio llevado a cabo en el año 2018, esto quiere decir, la absolución.
Minutos antes de ingresar a la sala de audiencias ubicada en el sexto piso del Tribunal Oral en lo Criminal N°2 de Mar del Plata, Cesar Sivo, defensor, señaló algunos detalles a los que su estrategia apuntaría a la hora de actuar como abogado particular de Offidani. A su vez, no olvidó referirse a las manifestaciones que tuvieron lugar “puertas afuera” por años y principalmente protagonizadas por familiares, asegurando que podrían “condicionar” el desarrollo de las siguientes sesiones en el debate.
En su exposición ante la prensa Sivo explicó: “es un juicio con una complejidad particular por lo que se ha generado puertas afuera. Si uno mira el proceso anterior, las pruebas y lo que se mostró, entendería que la solución sería la misma del caso anterior, quizás con una redacción de sentencia distinta. Pero en esencia la prueba muestra cosas muy diferentes a las que se sostienen”.
En la misma línea, el letrado afirmó que “socialmente se necesita una respuesta adecuada”, señalando que la misma debería ser “acorde con lo que las pruebas muestren”. En tanto añadió: “Si la idea es que solo hay justicia si hay perpetua, aunque sea a dos inocentes, o al menos uno como mi defendido, indudablemente estamos muy lejos de la idea de justicia. Lo importante es entender que los procesos se tienen que resolver en el ámbito que se tiene que resolver, no en la calle”.
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A la par, cuestionó la suspensión de los jueces del primer debate, Pablo Viñas y Facundo Gómez Urso, los cuales fueron retirados de su cargo a causa de su desempeño a la hora de sentenciar a Farias y Offidani por vender drogas fuera de la escuela de Lucia y la absolución en el apartado de abuso sexual y femicidio. “Muy mal antecedente”, alegó.
“Si la gente hace determinadas manifestaciones es porque entiende que es una forma de lograr alguna respuesta en un solo sentido, más allá de que haya pruebas o no”, afirmó. “Casación no dijo que las pruebas alcanzaban para otra cosa. El tribunal trabajo sobre la forma de redactar, que esa redacción no tenía perspectiva de género y que hacía pensar que el tribunal fuera parcial. Es algo completamente diferente a decir que las pruebas con perspectiva de género deben verse de otra manera”, añadió haciendo énfasis en las pruebas en debate.
Ya dentro de la sala de audiencias, el letrado comenzó a exponer su lineamiento, en el cual defendió que su cliente no había aportado “nada” en el hecho en juicio, y que “no hay hecho ilícito en sí”.
“Murió por un paro cardiaco. Sí, es importante ver en qué circunstancias se da, es verdad, pero eso es motivo de discusión. En el caso de mi asistido, insisto, no estaba dentro del domicilio, no estuvo en lo previo y eso es relevante en cuanto a mi posición como defensa. No es que estamos hablando de otro tipo de situaciones y una mecánica de muerte que tiene que ver con otras circunstancias: acá los médicos fueron contundentes”, dedicó a cerrar su discurso.
