Cientos de inmigrantes han sido expulsados de Estados Unidos. En su triste camino de vuelta han pasado por un puente, que conecta la ciudad estadounidense de El Paso con la mexicana de Ciudad Juárez. Sucedió al mismo tiempo en el que el presidente Joe Biden visitaba la localidad, de escala en su viaje a la cumbre en México con sus homólogos López Obrador y Trudeau.
Cientos de inmigrantes han sido expulsados de Estados Unidos. En su triste camino de vuelta han pasado por un puente, que conecta la ciudad estadounidense de El Paso con la mexicana de Ciudad Juárez. Sucedió al mismo tiempo en el que el presidente Joe Biden visitaba la localidad, de escala en su viaje a la cumbre en México con sus homólogos López Obrador y Trudeau.
El jueves, la Casa Blanca había anunciado la autorización a entrar en el país a treinta mil migrantes al mes procedentes de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela, pero deberán llegar por avión y esposorizados. Se trata de nuevas normas preparadas para cuando deje de aplicarse el Tïtulo 42 heredado de la presidencia de Donald Trump, que por causas sanitarias permitía la expulsión inmediata de los migrantes.
El secretario de Seguridad Nacional, el cubanoestadounidense Alejandro Mayorkas, ha reconocido la falta de cambios más profundos para solucionar la crisis. Ha destacado sin embargo que desde el pico de mediados de diciembre, el número de personas que accedieron ilegalmente por este cruce ha bajado de dos mil por 700 al día.